Hechos 1:8 pero cuando el Ruaj ha kodesj (Espíritu de Santidad) venga sobre ustedes, recibirán poder y saldrán a dar testimonio de mí, en Jerusalén, en toda la región de Judea y de Samaria, y hasta en las partes más lejanas de la tierra.



TRADUCTOR

jueves, 1 de junio de 2017

SHAVUOT: LA FESTIVIDAD DELAS SEMANAS



 Shavuot: La Fiesta de las Semanas

“Tres veces al año me celebraréis fiesta.”
Éxodo 23:14
Shavuot o Shavuos (con pronunciación ashkenazí) es una de las tres fiestas de peregrinaje llamadasShalosh Regalim (tres pies). Se llaman de esta forma porque se tenía que subir a Jerusalén tres veces al año para ofrecer sacrificios y ofrendas de acción de gracias por las cosechas.
“También celebrarás la Fiesta de las Semanas, es decir, los primeros frutos de la siega del trigo . . .”
Éxodo 34:22a
Shavuot” quiere decir “semanas” y es uno de los nombres hebreos que recibe esta Fiesta, también es llamada: Jag HaShavuot, la Fiesta de las Semanas, en griego recibe el nombre de “Pentecostés” (quincuagésimo). Es llamada de esta forma porque Dios ordena contar 50 días a partir del Día de la Primicias - Yom HaBikkurim (después del día de reposo) hasta la celebración de Shavuot.
“Siete semanas contarás; comenzarás a contar siete semanas desde el momento en que empieces a meter la hoz a la mies. Entonces celebrarás la Fiesta de las Semanas al SEÑOR tu Dios con el tributo de una ofrenda voluntaria de tu mano, la cual darás según el SEÑOR tu Dios te haya bendecido. Y te alegrarás delante del SEÑOR tu Dios, tú, tu hijo, tu hija, tu siervo, tu sierva, el levita que habita en tus ciudades, y el forastero, el huérfano y la viuda que están en medio de ti, en el lugar donde el SEÑOR tu Dios escoja para poner allí su nombre.”
Deuteronomio 16:9-11

"Contaréis desde el día que sigue al día de reposo, desde el día en que trajisteis la gavilla de la ofrenda mecida; contaréis siete semanas completas. "Contaréis cincuenta días hasta el día siguiente al séptimo día de reposo; entonces presentaréis una ofrenda de espiga tierna al SEÑOR.”
Levítico 23:15 y 16


“La Torá NO menciona la fecha en la que se celebra Shavuot, lo único que nos dice es que se debe contar 50 días después del “día de reposo”, pero los saduceos y los fariseos no se pusieron de acuerdo en la interpretación de este “día de reposo”, los saduceos afirmaban que se trataba del shabat semanal, por tanto, la expresión “después del día de reposo” se refería al domingo de la semana de la Fiesta de los Panes sin levadura, mientras que los fariseos enseñaban que el “día de reposo” NO era el shabat semanal, sino el primer día de la Fiesta de los Panes sin levadura (15 Nisán), por tanto, contaban (y cuentan) desde el día 16 de Nisán llegando a la fecha del 6 de Siván para la celebración de Shavuot.”

Es la única Fiesta que debemos anticipar a través de la cuenta de los 50 días (7 semanas), está cuenta recibe el nombre de la “Cuenta del Ómer” (Sefirat HaOmer). El ómer era una medida usada para los granos (Os. 3:2).

 el Rabino Najman nos enseña lo siguiente de la Sefirat HaOmer:
“Los cuarenta y nueve días de Sefirat HaOmer (la Cuenta del Ómer) corresponden a las cuarenta y nueve Puertas de la Teshuvá (del Arrepentimiento / Retorno). Estas cuarenta y nueve puertas se corresponden a su vez con las cuarenta y nueve letras que conforman los nombres de las Doce Tribus. Así, cada tribu tiene puertas individuales para cada uno de sus miembros, de modo que todos puedan retornar a Dios a través de su propia puerta. Y existe también la puerta cincuenta, la puerta más elevada: SHAVUOT. Esta puerta es, si así pudiera decirse, la Teshuvá, el “Retorno”, de Dios. Y cada persona puede llegar a su puerta individual mediante los Tehilim (Salmos). De modo que debemos recitar los Salmos durante los cuarenta y nueve días de la Sefirat (Cuenta) al igual que durante todos los días de Teshuvá (el mes de Elul, Rosh HaShaná). Esto nos llevará a nuestra Puerta del Retorno. Y, alcanzando esto, mereceremos la pureza y el retorno a Elohim. El que estos cuarenta y nueve días sean los más propicios para recitar los Salmos y arrepentirse es algo que aprendemos del comienzo del libro del Éxodo. El versículo dice: “Éstos son los nombres de los Hijos de Israel que descendieron a Egipto; cada hombre con su mujer, ellos llegaron”. En hebreo las últimas letras de estas palabras conforman las palabras Tehilim (los Salmos) y Teshuvá (el arrepentimiento- Retorno).”
En el libro “Preguntas y respuestas sobre Judaísmo” la escritora nos da un detalle muy interesante de las 7 semanas de la Cuenta del Ómer, veamos:
“. . . Las siete semanas bien pueden ser vistas como un tiempo de crecimiento espiritual sistemático, una forma de transición desde su estado de esclavitud en Egipto hacia un estado ideal de libertad representado por la entrega de la Torá en la Festividad de Shavuot, que tiene lugar 49 días después de la libertad física por medio del Éxodo.”
Otro nombre que recibe esta fiesta es Jag HaBikkurim, la Fiesta de las Primicias (Primeros Frutos).
"También, el Día de los Primeros Frutos, cuando presentéis una ofrenda de cereal nuevo al SEÑOR en vuestra Fiesta de las Semanas, tendréis santa convocación; no haréis trabajo servil.
Números 28:26
En Éxodo 13:2 vemos que los primogénitos de los hombres y de los animales pertenecen al Señor, en este Fiesta también se pone de manifiesto que los primeros frutos también pertenecen al Señor.
Otro nombre que recibe esta fiesta es Jag HaKatsir, la Fiesta de la Siega.
“También guardarás la Fiesta de la Siega de los primeros frutos de tus labores, de lo que siembres en el campo . . .”
Éxodo 23:16
En esta Fiesta se recogían y se dedicaban los primeros frutos de la cosecha del trigo, se celebraba la provisión y la bendición de Dios.
Cuando se presentaban las primicias se declaraba lo siguiente:
"Ahora, he aquí, he traído las primicias de los frutos de la tierra que tú, oh SEÑOR, me has dado."
Deuteronomio 26:15
Esta Fiesta también está marcada por la alegría.
“Y te alegrarás, tú y también el levita y el forastero que está en medio de ti, por todo el bien que el SEÑOR tu Dios te ha dado a ti y a tu casa.”
Deuteronomio 26:16
Muchas veces NO nos alegramos pensando en lo que no tenemos, por eso, el Eterno nos dice que consideremos lo que SÍ tenemos y nos alegremos por ello.
Dios quiere que nos alegremos con todo lo que él nos ha dado porque él nos da todas las cosas para que las disfrutemos.
“. . . nos da abundantemente todas las cosas para que las disfrutemos.”
I Timoteo 6:17
El creyente tiene muchos motivos para alegrarse, por eso Pablo nos dice:
“Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez lo diré: ¡Regocijaos!”
Filipenses 4:4

Los rabinos dieron un nombre especial a esta época: Zemán Matán Toratenu, “La época de la entrega de nuestra Torá”, los rabinos afirmaron que la entrega de la Torá coincidió con la celebración de esta Fiesta, el 6 de Siván (según la interpretación de los fariseos llegada hasta nuestros días). La Biblia NO especifica cuándo fue entregada la Torá, pero la afirmación de los rabinos es viable. Actualmente, su aspecto agrícola prácticamente ha desaparecido, por eso el énfasis de esta Fiesta es la entrega de la Torá en el Monte Sinaí (de hecho, este fue el énfasis principal a partir del 70 d.C.). Nuestros sabios nos dicen que Dios escogió el Monte Sinaí (Har Sinai) por dos razones:
1.      Como el Monte Sinaí está en el desierto nadie puede decir que el desierto es suyo, por tanto, la Torá fue entregada en un lugar neutro, un lugar sin propietario para que nadie pueda afirmar que la Torá fue dada a un Pueblo en concreto.

2.      Todos los montes de la región querían ser elegidos para que la Torá fuese entregada en ellos, pero el Monte Sinaí no se sentía digno, por eso el Eterno eligió al Monte Sinaí, por su gran humildad. Por la misma razón la Torá fue entregada a Moisés ya que era un hombre “muy humilde, más que cualquier otro hombre sobre la faz de la tierra” (Nm. 12:3).
Es curioso que nuestros sabios hayan dado el nombre de “Matán Torá”, la Entrega de la Torá, a esta fiesta y no “recepción de la Torá”, esto lo explican diciendo que la entrega fue para todos por igual, pero cada persona recibe la Torá de forma distinta con sus propias interpretaciones y aplicaciones. Rabí Isaac Meir de Gur dijo algo muy interesante:
“¿Por qué se denomina la fiesta de Shavuot “El tiempo de la entrega de la Torá” y no “El tiempo de del recibimiento de la Torá”? Porque la entrega de la Torá se hizo en el Monte Sinaí, mientras que el recibimiento de la misma es cosa de todos los días y de todos los tiempos.”
Otro nombre rabínico para esta Fiesta es Atséret que significa “conclusión” “culminación” o “final”, los rabinos ven la Fiesta de las Semanas como la conclusión de la Fiesta de Pesaj, de hecho la cuenta del ómer nos indica la existencia de una relación entre dichas fiestas, una de las enseñanzas que podemos sacar de esta relación es que el Dios que nos sacó de Egipto es fiel para bendecir nuestra cosecha. Otra enseñanza es que hemos sido liberados de Egipto (Pesaj) para poder recibir la Torá (Shavuot).
El término griego “Pentecostés” aparece en la Septuaginta y fue usado por las comunidades judías de habla griega y muchos creyentes en Yeshua. Todos los primeros creyentes guardaban la Fiesta de las Semanas / Pentecostés, debemos recordar que todos eran judíos.
“Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en un mismo lugar.”
Hechos 2:1

“Porque Pablo había decidido dejar a un lado a Éfeso para no detenerse en Asia, pues se apresuraba para estar, si le era posible, el día de Pentecostés en Jerusalén.”
Hechos 20:16

“Pero me quedaré en Éfeso hasta Pentecostés . . .”
I Corintios 16:8
En esta Fiesta debían ser presentados dos panes (Lejem tenufah):
"Traeréis de vuestras moradas dos panes para ofrenda mecida, hechos de dos décimas de un efa; serán de flor de harina, amasados con levadura, como primeros frutos al SEÑOR.
Levítivo 23:17
Muchos estudiosos creyentes afirman que estos dos panes representan a los judíos creyentes en Yeshua (ramas naturales) y los gentiles creyentes en Yeshua (ramas injertadas), la levadura nos indica que, tanto los judíos como los gentiles, hemos cometido pecado, pero Dios nos acepta por medio del sacrificio de Yeshua, el Cordero de Dios. Otros creyentes afirman que los dos panes representan las dos casas de Israel. La tradición rabínica afirma que estos dos panes representan el doble aspecto de la Torá: la Torá Escrita y la Torá Oral.
COSTUMBRES
-         En Shavuot los niños comenzaban el aprendizaje de las letras hebreas a la edad de 5 años, se traían los niños al maestro y el maestro los tomaba en sus brazos reflejando y simbolizando el siguiente versículo:
“Yo con todo eso enseñaba a andar al mismo Efraín, tomándole de los brazos . ..”
Oseas 11:3
El Maestro mostraba a los niños las letras del alfabeto en una tabla y en dicha tabla ponía miel, después de repetir las letras los niños se comían la miel, los niños desde pequeños debían entender la gran importancia de las letras y su relación con la Torá.
-         Se adornan las casas y las sinagogas con flores, hierbas aromáticas y ramas de árboles, esto se hace como recuerdo del carácter agrícola de esta fiesta y de las primicias que se ofrecían, también se enseña que esta costumbre se lleva a cabo porque el monte Sinaí floreció el día de la entrega de la Torá. El perfume que desprenden las flores y las hierbas aromáticas nos recuerda que cada palabra que salía de la boca de Dios llenaba de perfume el mundo. 

-         En Shavuot se lee el libro de Rut y Éxodo 19 y 20 poniendo un gran énfasis en la lectura de los 10 mandamientos. El libro de Rut es leído porque tiene el trasfondo de la cosecha, también porque el compromiso que tomó Rut de seguir al Dios de Israel es comparado con el compromiso establecido entre el Pueblo de Israel y Dios en la entrega de la Torá en el Monte Sinaí cuando todos afirmaron: “naasé venishmá” que significa “Haremos y escucharemos”. Otra de las posibles razones es porque el Rey David desciende de Rut y, según la tradición, David nació y murió en Shavuot.
-         Se suele comer fruta, productos lácteos y miel para recordar la dulzura de la Torá, la Palabra de Hashem es dulce.
“. . . miel y leche hay debajo de tu lengua, y la fragancia de tus vestidos es como la fragancia del Líbano.”
Cantar de los Cantares 4:11

¡Cuán dulces son a mi paladar tus palabras!
Más que la miel a mi boca.”
Salmo 119:013
Otra razón por la cual se come productos lácteos es porque las leyes de Kashrut (alimentos) acababan de ser dadas y el Pueblo de Israel no tenía preparada la carne según dichas leyes.


 PARALELISMOS ENTRE LA ENTREGA DE LA TORÁ Y EL DERRAMAMIENTO DEL RUAJ HA KODESH (ESPÍRITU SANTO) EN SHAVUOT

ENTREGA DE LA TORÁ / SHAVUOT
DERRAMAMIENTO DEL ESPÍRITU / SHAVUOT
Mandamientos escritos en tablas de piedra.
Mandamientos escritos en las tablas del corazón.
Escritos por el dedo de Dios.
Escritos por el Espíritu de Dios.
Recibimos la Letra de la Ley.
Recibimos el Espíritu de la Ley.
Hubo fuego sobre el Monte Sinaí.
Hubo fuego sobre los creyentes.
3000 personas murieron.
3000 personas recibieron vida espiritual.
Fue en el Monte Sinaí.
Fue en el Monte de Sión.


“Cuando llegó el día de Pentecostés (Shavuot) estaban todos juntos en un mismo lugar. De repente vino del cielo un ruido como el de una ráfaga de viento impetuoso que llenó toda la casa donde estaban sentados, y se les aparecieron lenguas como de fuego que, repartiéndose, se posaron sobre cada uno de ellos. Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba habilidad para expresarse.”
Hechos 2:1-4
En el primer Shavuot del Nuevo Pacto se produjo el comienzo del derramamiento del Espíritu Santo sobre toda carne prometido por Joel:
“Y sucederá que después de esto, derramaré mi Espíritu sobre toda carne; y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán, vuestros ancianos soñarán sueños, vuestros jóvenes verán visiones. Y aun sobre los siervos y las siervas derramaré mi Espíritu en esos días.”
Joel 2:28 y 29
El apóstol Pedro lo confirma con sus propias palabras:
“Entonces Pedro, poniéndose en pie con los once, alzó la voz y les habló diciendo: Varones judíos, y todos los que habitáis en Jerusalén, esto os sea notorio, y oíd mis palabras. Porque éstos no están ebrios, como vosotros suponéis, puesto que es la hora tercera del día. Mas esto es lo dicho por el profeta Joel: Y en los postreros días, dice Dios, Derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, Y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán; Vuestros jóvenes verán visiones, Y vuestros ancianos soñarán sueños; Y de cierto sobre mis siervos y sobre mis siervas en aquellos días.”
Hechos 2:14-18
A partir de este Shavuot que fue la culminación (Atséret) del Nuevo Pacto iniciado en Pesaj, el Espíritu Santo NO sería solamente dado a los reyes, sacerdote y profetas (estos eran los ungidos de Dios en el Tanaj), a partir de ahora, TODOS podemos recibir el poder del Espíritu Santo, es decir, al unción derramada de Dios. Poder ¿para qué? . . . Para ser testigos de Yeshua, para proclamar lo que hemos oído, visto y experimentado de Yeshua . . .

“recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.”
Hechos 1:8

“He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.” Lucas 24:49
Ahora el Espíritu Santo nos ayuda a llevar a cabo la Palabra y la Voluntad de Dios, el Espíritu Santo nos capacita para poder llevar el mensaje de Yeshua a todas las naciones, la entrega de la Torá (Matán Torá) marcó al Pueblo de Dios, pero también el derramamiento del Espíritu Santo ha marcado a Su Pueblo, gracias a Matán Ruaj podemos experimentar la presencia, el poder y la vida de Dios fluyendo en nuestro interior.
“El que cree en mí, como ha dicho la Escritura: "De lo más profundo de su ser brotarán ríos de agua viva." Pero Él decía esto del Espíritu, que los que habían creído en El habían de recibir; porque el Espíritu no había sido dado todavía, pues Yeshua aún no había sido glorificado.”
Juan 7:38 y 39
Hombres débiles y cobardes se convirtieron en hombres poderosos y valientes gracias al Espíritu Santo . . . hombres que caminan en una nueva dinámica de fe y en una nueva dimensión espiritual . . .
“Mas esto es lo dicho por el profeta Joel:
Y en los postreros días, dice Dios,
Derramaré de mi Espíritu sobre toda carne,
Y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán;
Vuestros jóvenes verán visiones,
Y vuestros ancianos soñarán sueños;
Y de cierto sobre mis siervos y sobre mis siervas en aquellos días.”

¡Qué bueno es estar viviendo en “aquellos días”!
Baruj Atá Adonai Notén haTora
Bendito eres tú Señor dador de la Torá

Baruj Atá Adonai notén haRuaj haKodesh
Bendito eres tú Señor dador del Espíritu Santo

 JAG  SHAVUOT  SAMEAJ



LA CELEBRACIÓN DE SHAVUOT





SHAVUOT


Es uno de los días más sagrados del año judío, y es también uno de los menos conocidos. 

¿De qué se trata Shavuot realmente?


Es irónico que Shavuot sea una festividad tan poco conocida. Porque en realidad, Shavuot conmemora el evento más importante en la historia judía – la entrega de la Torá en el Monte Sinai.

Shavuot es la culminación de la "cuenta del Omer" de siete semanas de largo, que comienza después de Pesaj. El mismo nombre "Shavuot" significa "semanas", en reconocimiento a las semanas de expectación que nos llevan a la experiencia en Sinai. (Dado que Shavuot ocurre 50 días después del primer día de Pesaj, es a veces conocida como "Pentecostés", una palabra griega que significa "la festividad de 50 días").

3.300 años atrás, después de haber dejado Egipto en la noche de Pesaj, los judíos viajaron hacia el Desierto del Sinai. Ahí, el Pueblo Judío completo – 3 millones de hombres, mujeres y niños – experimentaron directamente la revelación divina:

Dios les habló de en medio del fuego; ustedes estaban oyendo el sonido de palabras, pero no estaban viendo una forma, sólo un sonido. Él les dijo de su pacto, ordenándoles cumplir los Diez Mandamientos, y Él los grabó en dos tablas de piedra (Deuteronomio 4:12-13).

La entrega de la Torá fue un evento de inmensas proporciones que grabó indeleblemente al Pueblo Judío con un carácter, fe y destino únicos. Y en los 3.300 años desde que ocurrió este evento, los ideales de Torá – monoteísmo, justicia, responsabilidad – se han convertido en la base moral de la civilización occidental.

¿Cómo celebrar Shavuot?

Quizás la razón para el relativo desconocimiento de Shavuot es porque esta festividad no tiene "símbolos" obvios del día – es decir, no hay Shofar, no hay Sucá, no hay Janukiá.

En Shavuot, no hay símbolos que nos distraigan del foco central de la vida judía: la Torá. ¿Entonces como conmemoramos Shavuot? Es una altamente expandida costumbre quedarse despierto toda la noche estudiando Torá. Y ya que la Torá es el camino a la auto-perfección, el estudio de la noche de Shavuot es llamado Tikún Leil Shavuot, que significa "un acto de auto-perfección en la noche de Shavuot".

En los servicios de la sinagoga en la mañana de Shavuot leemos el libro bíblico de Ruth. Ruth era una mujer no-judía cuyo amor por Dios y la Torá la llevaron a convertirse al judaísmo. La Torá indica que las almas de los eventuales conversos también estuvieron presentes en Sinai, como dice: "Yo estoy haciendo [el pacto] con aquellos que están aquí hoy, y también con aquellos que no están hoy aquí" (Deuteronomio 29:13).

Ruth tiene otra conexión más con Shavuot, y es que ella se convirtió en ancestro del Rey David, quien nació en Shavuot, y murió en Shavuot.

En Shavuot es costumbre decorar la sinagoga con ramas y flores. Esto es porque el Monte Sinai floreció el día en que se entregó la Torá. La Biblia también asocia a Shavuot con la cosecha de trigo y frutas, y marca el momento en que se traían los primeros frutos al Sagrado Templo, como una expresión de gracias (ver Éxodo 23:16, 34:22 y Números 28:26).


Alimentos Lácteos

Hay una costumbre judía universal de comer alimentos lácteos en Shavuot. Varias razones han sido dadas por los sabios, siendo algunas más convincentes que otras. Aquí ofrecemos una selección:
El libro bíblico Cantar de los Cantares (4:11) se refiere al dulce valor nutritivo de la Torá diciendo: "La dulzura de la Torá mana de tus labios, como miel y leche yace bajo tu lengua".

El versículo en Éxodo 23:19 yuxtapone la festividad de Shavuot con la prohibición de mezclar leche y carne. En Shavuot, por lo tanto comemos cenas separadas – una de leche y una de carne.

Con la recepción de la Torá en el Monte Sinai, los judíos inmediatamente se vieron obligados a cumplir las leyes de Shejitá – matanza de animales. Ya que no tuvieron tiempo de preparar carne casher, ellos comieron lácteos en su lugar.

Peregrinaje al Muro Occidental (El Kotel)

En 1967 concluyó la Guerra de los Seis Días, sólo unos pocos días antes de Shavuot. Israel había recuperado el Muro Occidental, y por primera vez en 19 años los judíos tenían acceso al área que rodea al Monte del Templo, el sitio más sagrado del judaísmo. En Shavuot mismo, el Muro Occidental se abrió para los visitantes, y en ese memorable día más de 200,000 judíos viajaron a pie al Muro Occidental (en Jerusalem los autobuses no transitan en las festividades judías).

En años siguientes, este "peregrinaje peatonal" se ha vuelto una tradición recurrente. Temprano en la mañana de Shavuot – luego de una noche completa de estudio de Torá – las calles de Jerusalem están llenas de decenas de miles de judíos caminando hacia el Muro Occidental.

Esta tradición tiene un precedente bíblico. Shavuot es una de las tres festividades de peregrinaje del judaísmo, cuando todo el pueblo se reunía en Jerusalem para celebrar y estudiar.


Shavuot —el festival que conmemora la entrega de la Torá en el Monte Sinaí— se conoce también, como ya hemos mencionado, con el nombre de Festival de la Cosecha —Jag Hakatzir— o Día de los Primeros Frutos—Jag Habikurim.

Nadie trabaja más duro que el agricultor, y, simultáneamente, nadie tiene tanta inseguridad sobre los frutos de su trabajo como éste.

El labrador depende completamente de los "elementos" de la naturaleza.

Se necesita sol, pero no demasiado, para que no se produzca una sequía que arruine lo plantado. Se precisan lluvias, pero a su exacto y debido tiempo. El rocío, el viento, la temperatura — todos son factores importantes. ¿Qué puede hacer el pobre agricultor más que rogar a Di-s para que El bendiga el producto de sus manos y le brinde una buena y abundante cosecha?

No es de extrañar, pues, que la época de la cosecha fuera ocasión de gran regocijo en la antigua Tierra de Israel.

El campesino judío sabía que todo lo debía al querido y piadoso Di-s.

Para no olvidar esta verdad, decimos en nuestras oraciones diarias (en el Shemá) "Y ocurrirá si obedecéis Mis mandamientos... entonces daré las lluvias de vuestra tierra en su temporada... y recogeréis vuestro grano, vuestro vino y vuestro aceite." (Deuteronomio 11:13,14).

La época de la cosecha, en la vieja Israel, comenzaba en Pesaj, cuando el grano de cebada comenzaba a recogerse, y el "Omer" se llevaba al Templo como ofrenda de Gracias.

Pronto, maduraban los otros granos y frutas, pero "Bikurim", la ofrenda de los primeros frutos maduros, no debía llevarse al Templo antes de Shavuot.

Durante todo el verano, desde Shavuot hasta Sucot, había tiempo para traer Bikurim al Sagrado Templo.

Los Primeros Frutos debía ser traídos solamente de las "siete especies" por las cuales se alaba a la Tierra de Israel: trigo, cebada, uvas, higos, granadas, aceitunas y dátiles (Deut. 8:8).

Todo un tratado de la Mishná está dedicado al tema de Bikurim y lleva su nombre. Aquí encontramos las diversas leyes: sobre quién recaía la obligación de llevar Bikurim, quién estaba exento de hacer la Declaración, y finalmente, quién estaba exento de ambos. No entraremos en el detalle de estas leyes, sino que daremos la muy interesante descripción de toda la ceremonia, que encontramos en la Mishná.

Cuando un hombre iba a su campo, huerta o viñedo, y veía por primera vez un higo maduro, o un racimo de uvas maduro, o una granada madura, la envolvía con un junquillo y decía: "Estos son los Primeros Frutos".

Imaginen qué tentación era para el campesino el arrancar el primer higo maduro y llevarlo a la boca. Pero no se entregaba a la tentación, sino que lo designaba como ofrenda a Di-s por la buena cosecha.

Recogiendo todos los Primeros Frutos, y agregándoles muchos más, de entre los mejores, el agricultor se dirigía a la ciudad más próxima y desde allí, junto con sus colegas, se dirigía a la ciudad de Maamad —la principal del distrito—.

Allí, reunidos en el mercado bajo un cielo limpio y azul, los campesinos pasaban la noche. Temprano por la mañana, el oficial del Maamad los despertaba llamando: "Levantaos vosotros, y vayamos hasta Sión, a la Casa de nuestro Di-s".

Aquellos campesinos que vivían cerca de Jerusalem traían los frutos frescos, pero aquellos que vivían lejos traían higos secos y pasas de uvas, para que la fruta no se arruinara en el camino.

Los frutos se llevaban en canastas decoradas. Los ricos llevaban canastas de oro y plata, mientras que los pobres utilizaban canastas confeccionadas con ramillas de sauce peladas. Muchos llevaban palomas vivas consigo, junto con la canasta, como sacrificios.

Cuando más se acercaban los peregrinos a Jerusalem, mayor era su número, y su alegre espíritu.

Al frente de la impresionante procesión marchaba un hermoso buey, futura ofrenda. Sus cuernos estaban cubiertos con oro, y un collar de hojas de olivo adornaba su cuello. Una flauta sonaba ante ellos, hasta llegar a Jerusalem. Cuando llegaban a las cercanías de la ciudad, los gobernantes y prefectos, jefes de los sacerdotes y jefes de los Levitas y los oficiales del Templo, salían a recibirlos.

También todos los artesanos de Jerusalem solían salir e inclinarse ante los recién llegados, diciendo: 'Hermanos de tal o cual lugar, sed bienvenidos'.

La procesión continuaba hasta llegar al Monte del Templo, precedida por los flautistas. Cuando llegaban al Monte del Templo, cada uno, hasta el mismo rey, ponía su canasta sobre el hombro y entraba hasta el Patio del Templo.

Cuando los portadores de Bikurim llegaban al Templo, los Levitas cantaban: '¡Y Te exaltaré, Oh Señor, pues Tú me Has elevado e impedido que mis enemigos triunfen sobre mí" (Salmo 30).

Las palomas atadas a los canastos eran entonces sacrificadas, y lo que el pueblo traía en sus manos era entregado a los Sacerdotes.

Mientras el canasto estaba todavía sobre su hombro, cada portador de Bikurim recitaba la "Declaración" (Deut. 26:5). Esta Declaración contenía, en pocas palabras elegidas, la antigua historia de nuestro pueblo, incluyendo la esclavitud egipcia y la liberación. Concluía con las palabras: "Y Él nos ha traído hasta este lugar, liberándonos, y nos ha dado esta tierra, una tierra que rebalso de leche y miel. Y ahora, he aquí que he traído los Primeros Frutos de esta tierra que Tú, Oh Señor, me has dado" (Deut. 26:10).

Luego dejaba el canasto al lado del altar, se inclinaba y salía.

Luego de la grande e impresionante ceremonia de la ofrenda del Bikurim, Jerusalem se convertía en una ciudad de solemne alegría y regocijo, de acuerdo con el mandamiento: "Y te alegrarás por todo lo bueno que el Señor, Tu Di-s, te ha dado a ti ya tu casa; tú, el Levita, y el extraño que se encuentre entre vosotros" (Deut. 26:11).



La festividad de Shavout constituye el segundo de los Tres Festivales de Peregrinación (los otros dos son de Pesaj y Sucot) en los que, de acuerdo al mandato bíblico, cada judío debe presentarse en el gran Templo de Jerusalén en general, esta festividad es conocida con los siguientes nombres, los cuales refleja características proféticas y espirituales:



1. Zman Matan Torateinu – Epoca de la Entrega de Nuestra Tora

En el sexto día del mes Siván (era un día Shabat), del año 2448 luego de la creación, (1312 antes de la E Común) Di-s no dio la Torá en el Monte Sinai. La Fiesta de las Semanas (Shavuot), el 6 y 7 de Siván, conmemora este gran evento

2. Jag Hashavuot – Fiesta de las Semanas

Este festival recibe tal nombre pues se celebra al finalizar las siete semanas de Sefirat Haomer, cuya cuenta diaria se habia emprendido en la segunda noche de Pesaj

3. Jag Hakatzir – Festival de la Cosecha

En la tierra de Israel, ésta era la época de la cosecha, especialmente aquella de trigo. Las primeras ofrendas de la nueva cosecha se hacían bajo la forma de dos panes de trigo – Shtei Halejem

4. Iom Habikurim – Día de las Primicias

El festival de Shavuot marcaba, además, el principio de la época para ofrendar los “primeros frutos” – Bikurim, cuando el Santo Templo existía en Jerusalén.


lunes, 24 de abril de 2017

Yom Hashoa. Diremos Nunca Mas.




Día de la Conmemoración del Holocausto – Yom Hashoa.

El Día de la Conmemoración del Holocausto marca el aniversario del alzamiento del gueto de Varsovia en Polonia, entre el 19 de abril y el 16 de mayo de 1943. Conocido como Yom Hashoah entre el pueblo judío, el Día de la Conmemoración del Holocausto es una conmemoración reconocida internacionalmente de las víctimas y sobrevivientes del holocausto judío en la Europa ocupada por los nazi.

En este dia Israel honra la memoria de los Seis Millones de judíos asesinados, estudiando sobre su heroísmo frente a la inhumanidad y explorando las raíces del antisemitismo.

El Holocausto es uno de los períodos más dolorosos de la historia moderna judía. Hay muchas lecciones que podemos aprender de este trágico período que ciertamente no debemos olvidar. Aquí hay dos con las que me identifico.
Este oscuro período en el que para muchos parecía que Dios se estaba escondiendo, irónicamente muestra lo importante que es Dios en nuestras vidas, incluso en una sociedad supuestamente educada y civilizada.
Antes del Holocausto, Alemania era una de las sociedades más cultivadas y sofisticadas. Algunos de los más grandes antisemitas eran los intelectuales.
Hitler rechazaba la idea de someterse a una autoridad superior. Una estrofa de una canción de las Juventudes Hitlerianas decía: “El Papa y el Rabino ya no estarán, queremos ser paganos otra vez”.
Hitler creía en la supremacía de la raza aria, la que los nazis llamaban “la raza maestra”. Una persona sólo puede creer eso si niega la existencia de Dios. Si todos fuimos creados a imagen y semejanza de Dios, entonces no hay una “raza maestra”. Perseguir a un pueblo es una afrenta al Creador. Al proclamar su superioridad, los nazis le quitaron a la humanidad su divinidad innata. Pasó a no haber diferencia entre matar a un roedor o a un judío. En sus películas de propaganda, los nazis utilizaron videos de alimañas y los empalmaron a videos de judíos, para adoctrinar esta equivalencia.
Los nazis mostraron la absoluta indiferencia por la vida humana a la que sólo una ideología atea puede llevar. Necesitamos recordar lo bajo que la humanidad puede descender, para recordar lo importante que son Dios y la moral como un ancla en nuestras vidas. Sin eso, las personas pueden convertirse en salvajes con trajes y corbata.

Hitler sabía más sobre lo que significa ser un judío que muchos judíos de hoy en día.
La segunda lección del Holocausto gira alrededor de una triste verdad: Hitler sabía más sobre lo que significa ser un judío que muchos judíos de hoy en día. Si alguien te preguntara: “¿Qué significa ser judío?”, ¿qué le responderías? Trágicamente, muchos judíos dirían que significa que la gente nos odia y trata de asesinarnos. Si eso es todo lo que significa para ellos, entonces ¿Por qué están orgullosos de ser judíos? ¿Es acaso la desenfrenada asimilación que vemos hoy en día una sorpresa?
Hitler dejó en claro porqué quería exterminar a los judíos. Quería eliminar hasta el último judío del mundo. La razón que dio es que el judío es la consciencia del mundo, su voz moral. En sus palabras: “Los Diez Mandamientos han perdido su validez. La consciencia es una invención judía, es una imperfección, así como la circuncisión”.
Somos los portadores del mensaje del Sinaí. Este mensaje, si bien le da sentido a nuestras vidas, al igual que a todas las cosas de valor, tiene un costo asociado. El costo es parte de su valor: el privilegio y la responsabilidadde ser los mensajeros divinos de la moralidad. Hitler quería actuar de manera desenfrenada, hacer lo que tuviera ganas sin ningún tipo de remordimiento. El judío era una espina en su costado, un recordatorio constante de las expectativas que nuestro Creador tiene para cada uno de nosotros.
Está escrito en el libro de Isaías que el pueblo judío tiene la obligación de ser una “luz para las naciones”, vivir una vida ejemplar, mostrarle al mundo lo que significa ser honesto, caritativo y amable. Israel ha hecho esto recientemente en Haití, estableciendo allí uno de los hospitales más avanzados. Una mujer haitiana que dio a luz en ese hospital llamó a su bebé Israel, debido a su profunda gratitud por la ayuda que había recibido.
No es suficiente con sólo leer sobre el llamado de Dios a ser “una luz para las naciones”, el mensaje necesita ser vivido y debe estar grabado en nuestros corazones. El mundo está esperando que nos paremos orgullosos y que digamos con convicción: “Esto es lo que significa ser un judío”. ¿Cuánto tiempo debe Dios estar escondido esperando a que nosotros escuchemos Su llamado?



viernes, 10 de marzo de 2017

SAMEAJ PURIM

La historia  de Purim




Una Fiesta Fatídica

Todo comenzó en la antigua Persia, en el siglo 4 a.e.c. El Santo Templo que se levantaba en Jerusalén había sido destruido hacía 50 años, y los judíos eran súbditos del poderoso imperio persa, que se extendía por 127 países.

Tres años después que el Rey Asuero ascendió al trono persa, cuando se sintió seguro en su nuevo cargo, celebró con una gran fiesta que duró 180 días para todos sus súbditos. Siguiendo a esta extravagante gala, Asuero realizó una fiesta más pequeña de una semana de duración para los residentes de Shushan, la ciudad capital. En el área de las mujeres del palacio, la esposa de Asuero, la Reina Vashti, realizó su propia fiesta para las mujeres del pueblo de Shushan.

En el séptimo día de esta fiesta, el corazón de Asuero “estaba alegre por el vino”, y ordenó que su esposa Vashti se presentara ante todos los hombres presentes en la fiesta —quería mostrarle a todos su exquisita belleza. Vashti se mostró reacia al pedido, y ante la sugerencia de su consejero Memujan, Asuero ordenó la ejecución de Vashti.

El Concurso de Belleza

Cuando la cólera de Asuero se disipó, se sintió sólo sin una esposa. Sus sirvientes le sugirieron que organizara un desfile de belleza. Serían designados funcionarios en todas las tierras del rey, y todas las niñas hermosas serían traídas a Asuero. Y la niña que hallara favor a los ojos del rey sería la nueva reina.

El líder de los judíos en esa época era un residente de Shushan llamado Mordejai. É tenía una prima, Ester que había quedado huérfana de niña. Mordejai la crió y la trató como una hija. A pesar que ella no deseaba ser reina, Ester fue llevada a la fuerza al harén del rey, para participar en el concurso. Mientras las otras concursantes se embellecían con perfumes y lociones, Ester no hacía nada. Pero Di-s tenía sus propios planes. Cuando Ester se presentó ante el rey, inmediatamente el se enamoró de ella, y Ester se convirtió en la nueva Reina de Persia. Pero por orden de Mordejai, Ester se rehusó a divulgar su nacionalidad —aun al rey.

Mordejai al Rescate

Poco después que Ester se convirtiera en reina, Mordejai oyó a dos de los chambelanes del rey discutiendo un plan para asesinar al rey. Mordejai los denunció, y los traidores fueron ahorcados.

El Primer Ministro Antisemita

Entretanto, Haman, uno de los ministros de Asuero fue ascendido al cargo de Primer Ministro. Haman era un virulento enemigo de los judíos; en realidad era descendiente de la notoriamente antisemita nación de Amalek.

Inmediatamente después de su ascenso, el rey emitió un decreto ordenando que todos se inclinaran cada vez que Haman aparecía. Haman se paseaba con un gran ídolo colgado de una cadena alrededor de su cuello. Cuando Mordejai, un orgulloso judío, se rehusó a inclinarse, Haman se enfureció. Resolvió tomar venganza contra todos los judíos, y arrojó suertes para determinar el día “afortunado” para implementar su plan. La suerte cayó en el decimotercer día del mes hebreo de Adar.

Haman se aproximó a Asuero y le ofreció 10.000 talentos de plata a cambio del permiso para exterminar a los judíos. Asuero, que tampoco era amigo de los judíos, le dijo a Haman: “El dinero es tuyo, guárdalo, y la nación es tuya para hacer lo que te plazca”.

Inmediatamente Haman envió proclamas a todas las tierras del rey. Esos bandos, sellados con el sello real, ordenaban que la gente se alzara contra los judíos y los mataran a todos —hombres, mujeres y niños —el siguiente 13 de Adar.

El Pedido de Mordejai

Mordejai se enteró del decreto. Rasgó sus vestiduras y se vistió con arpillera. Envió un mensaje a Ester, pidiéndole que se presentara ante el rey y le rogara que salvara a su pueblo. Ester le respondió que de acuerdo con las leyes, cualquiera que se presentara ante la presencia del rey sin ser convocado sería condenado a muerte —a menos que el rey le extendiera a esa persona su cetro de oro. “Y yo” dijo Ester “¡No he sido convocada por el rey desde hace treinta días!”

Mordejai envió otro mensaje: “No pienses que escaparás a la suerte de los judíos por estar en el palacio del rey. Porque si permaneces en silencio en este momento, el alivio y la salvación vendrán para los judíos de otra fuente, y tú y la casa de tu padre se perderán. Y quien sabe si no fue para este momento que tú llegaste a esta posición real”.

Ester aceptó presentarse ante el rey. Pero le pidió a Mordejai que reuniera a todos los judíos de Shushan y que ayunaran tres días y tres noches. Y después de este ayuno. Ester arriesgaría su vida y se presentaría ante el rey.

Mordejai cumplió con el pedido de Ester. Reunió a los judíos de Shushan —especialmente los niños, 22.000 de ellos —y ayunaron, se arrepintieron y oraron a Di-s.

El Primer Banquete

Tras tres días de ayuno, Ester vistió sus vestimentas reales y entró a la cámara de Asuero. Inmediatamente el rey extendió su cetro. “¿Qué ocurre?” Preguntó Asuero. “¿Cuál es tu pedido?”

“Quisiera invitar al rey y a Haman a un pequeño banquete que he preparado” respondió Ester.

Y el rey y Haman se unieron a Ester en el brindis. Durante el banquete, el rey nuevamente preguntó a Ester si no tenía nada que pedir. “Si” respondió Ester. “Apreciaría que mañana, nuevamente, el rey y Hamas se unieran a mi para un banquete. Y entonces le diré al rey mi pedido”.

Haman abandonó la fiesta alegre y orgulloso. ¡Qué honor le había sido concedido! Pero parado a la puerta del rey estaba Mordejai —quien aun se rehusaba a inclinarse ante Haman —y Haman estaba furioso. Cuando arribó a su hogar, su esposa y sus sabios consejeros le sugirieron que levantara una horca, y luego fuera al rey y pidiera permiso para ahorcar a Mordejai. Excitado Haman preparó la horca.

El Comienzo del Fin

El sueño abandonó al rey esa noche, por lo que pidió a sus sirvientes que le leyeran las Crónicas Reales. Ellos cumplieron las órdenes del rey. Leyeron en las Crónicas como Mordejai salvó la vida del rey, cuando sus dos chambelanes se complotaron para matarlo.

“¿Fue recompensado por este buen acto?” Preguntó Asuero. “No, no lo fue” respondieron los sirvientes.

En ese momento Haman entró al patio del rey. ¿Su propósito? ¡Pedir permiso al rey para ahorcar a Mordejai! Antes que Haman pudiera pronunciar palabra, Asuero se dirigió a él: “Haman, en tu opinión, ¿qué se debe hacer a una persona a la que el rey desea honrar?”

Haman, que estaba seguro que el rey quería honrarlo, respondió: “Trae las vestimentas reales y un caballo real. Y que uno de los nobles del rey vistan al hombre y lo lleven en el caballo a través de las calles de la ciudad, proclamando ante él: ¡Así se hace al hombre a quien el rey desea honrar!’”

“Gran idea” respondió Asuero. “¡Trae las vestimentas y el caballo y haz eso con Mordejai, el judío!”

Haman no tuvo otra opción que cumplir. Al día siguiente fue y honró a Mordejai como el rey había ordenado, e inmediatamente se apuró a unirse al rey y Ester para…

El Segundo Banquete

“¿Cuál es tu pedido?” Preguntó a Ester un curioso rey Asuero en el banquete.

“Si he hallado favor a tus ojos, oh Rey” suplicó Ester “y si place al rey, que mi vida me sea concedida por mi súplica, y la vida de mi pueblo por mi pedido. ¡Pues mi pueblo y yo hemos sido vendidos para ser aniquilados, muertos y destruidos!” Entonces Ester identificó a Haman como la malvada persona que deseaba perpetrar esta atrocidad.

El rey de enojó grandemente. Cuando se le informó que Haman había construido una horca para Mordejai, ordenó que Haman fuera ahorcado en esa misma horca.

Las Cosas se Dan Vuelta

En ese día las propiedades de Haman le fueron entregadas a Ester y Mordejai fue designado Primer Ministro en lugar de Haman.

Pero Ester estaba lejos de sentirse satisfecha. Haman estaba muerto, pero su malvado decreto aun estaba en vigencia. De acuerdo con la ley persa, una vez que el rey emitía un decreto, no podía ser rescindido. Pero el rey dio a Mordejai y Ester permiso, y ellos, rápidamente escribieron un decreto que revocaba el edicto de Haman. El decreto otorgaba a los judíos permiso para defenderse contra sus enemigos. Y en ese momento, considerando que todos sabían que la reina y el Primer Ministro eran judíos, ¡nadie evitó que los judíos hicieran esto!

Y los judíos de Shushan fueron tan felices. ¡Las celebraciones abundaron!

La Batalla

El 13 de Adar de ese año, los judíos de todo el Imperio Persa se movilizaron y mataron a los enemigos que querían matarlos. En Shushan, entre los muertos estaban los diez hijos de Haman.

Ester pidió al rey permiso para que los judíos de Shushan tuvieran un día más para destruir a sus enemigos —y el rey accedió a su deseo. En ese día, el 14 de Adar, los judíos de todo el mundo celebraron, y los judíos de Shushan mataron a más de sus enemigos, y también ahorcaron a los hijos de Haman. Por consiguiente los judíos de Shushan descansaron y celebraron el 15 de Adar.

En Conmemoración

Mordejai y Ester establecieron una festividad para conmemorar esos maravillosos eventos. Los judíos de todo el mundo celebran el 14 de Adar, mientras que los residentes de ciudades amuralladas —como Shushan —celebran el 15 de Adar. Esta festividad es llamada “Purim” y es la más alegre del calendario judío.


contribucion de jabad

lunes, 23 de enero de 2017

El mundo, el Huerto y el Eden

Bereshit 2



El mundo, el Huerto y el Eden



2:9 Hashem, Elokim, hizo brotar del suelo (del Edén) toda clase de árbol agradable a la vista y bueno como alimento.

Y también del Árbol de la Vida en medio del Jardín y el Árbol del Conocimiento del bien y del mal…….

…….15 Hashem, Elokim, tomó al hombre y lo puso en el Gan (Jardín) Edén para que lo labrara y lo guardase.



Cuando Hashem termino de crear todas las cosas, y al hombre, hizo un lugar especial para el, para tenerlo cerca, y estar en plena comunión con su crecían mas preciada, Adam. Y lo tomo y lo puso en el Eden. Esto nos habla que fue tomado del resto del mundo, y llevado a un lugar especial, el huerto, y dentro de él estaba Eden, un lugar de intimidad y armonía. 



Aquí nos habla de 3 niveles, al igual que las divisiones de la tienda de reunión y luego Bet ha Mikdash, que serian;



- El mundo : el atrio ( el cuerpo)

- El huerto : el lugar santo (el alma)

- El Eden; el lugar santísimo (el espíritu)



Y detalla la escritura en Bereshit, que en medio de Eden, estaba el árbol de la vida.



Podemos entender entonces, que en medio del lugar santísimo, o de Eden, estaba la Torah, y la presencia misma de Hashem.



Misheli 3:18



Ella es árbol de vida para los que echan mano de ella, Y dichosos son los que la abrazan.



Pero Hashem puso al hombre, a Adam, en ese lugar con un propósito y objetivo, con una clara responsabilidad, que mantendría todo el equilibrio.



Y dice para que lo labrase y guardase (verso 15)



Que labrase toda la tierra del lugar mas intimo, para ir extendiendo el Reino de Hashem con la semilla del árbol de la vida, y que guardase la relación de intimidad con Hashem y su Torah, para que nada la perturbara.



La relación y el crecimiento de cada uno con Hashem, se debe al trabajo, al como guardamos, al deseo de querer tener esa relación intima en medio de un lugar especial espiritual con el Creador, que hoy la podemos seguir realizando y teniendo. 


- la diferencia, el la perdió.

- nosotros, la hemos recuperados, por medio del segundo Adam, Yeshua.



Y eso depende de cómo estamos ejerciendo esa labor y misión como hijos de Adam por medio de Mashiaj,



Primero, en cual de las 3 áreas estamos;



- Mas lejos (el mundo), en medio (aquí y allá), o en intimidad con Hashem.

- Estamos labrando, trabajando, para esforzarnos y estar subiendo de nivel por ello.

- Estamos cultivando y haciendo crecer la semilla de vida, la Torah, que ha puesto en nosotros, y nutriéndonos del árbol de vida, para que produzca frutos benignos en nuestro ser.



Todo eso se puede, todo eso depende de cada uno de nosotros, todo depende de cuales son nuestros objetivos en este “mundo”.



Hashem puso todo lo bueno a nuestro alcance (verso 9), pero que nada ciegue nuestra vida, para dejar de abrazar y guardar el árbol de vida.



Ella, la vida y espíritu de la Torah, la esencia del Mashiaj, equilibrar en conocimiento.



Vivamos siempre en el lugar mas intimo, vivamos cada día en el Eden.




Moreh Yosef A.